Combinando la llegada del buen tiempo y la moda pantalonística y faldística actual, se empiezan a ver más culos por la calle en una sola mañana que sumando los que se puedan encontrar en varias visitas veraniegas a las diversas playas nudistas en donde podamos acabar distraídamente en verano...
Y es que ciertas exhibiciones traseras urbanas, en supermercados, bancos o autobuses, acaban provocando inevitables miradas, a veces involuntarias, a veces saboreadas con deleite, motivando variedad de emociones diversas a su alrededor, que oscilan desde el escándalo y la (sin)vergüenza ajena hasta el eterno agradecimiento visual, además de causarnos inesperadas sorpresas de vez en cuando...
Algunos, de verdad que no hacía falta para nada verlos o figurarlos, en cambio otros son una provocación ambulante, pero sea como sea, en el siglo XXI los culos han tomado definitivamente las calles... Cómo han cambiado los tiempos, hace apenas unos años, los únicos culos al aire que podías encontrar por la ciudad eran los de las estatuas, de belleza clásica o contemporánea, y realizados en el nombre y con la excusa del arte, el guion lo exige querida y sufrida modelo de culo, has de prestar tus posaderas para la eternidad..
Siempre me ha hecho cierta gracia, por sonoridad y significación, la conocida expresión popular anglosajona Kiss my ass, pero hay maneras y maneras de ponerla en práctica, creo que es mejor con los labios que con un rotulador, por favor...
Y ahora, tras este repaso a tanto culo, dejaremos descansar un poco a nuestras queridas esculturas... Mañana será otro día
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