miércoles, 22 de abril de 2009

–Hoy creo que vas a llegar tarde al trabajo.
Sus labios dibujan una escondida sonrísa. Pero ¿Como puede saberlo?
No entiendo nada, su imágen se hace paso entre las siluetas de la gente, a través de mi mirada pérdida, ácida mezclolanza de agridulces olores matinales, perfumes baratos, 'after shaves', esencias varias pegadas rutinariamente en el cuerpo, aromas de nicotinas adheridas a dedos amarillentos, sudores corporales, día soleado primaveral, temperaturas humanas altas.

El viaje de pié en un autobús repleto, es muy incómodo, la gente en cada parada se aprieta más, puedo ver su rostro sonriente a tres metros, una sonrisa que destaca entre tantas caras crispadas por sus propios penamientos, el autobús atrapa varios baches, para que nos vayamos 'acomodando', los rostros bailan al compás de los traqueteos, enlaza tres curvas, 2 acelerones y 4 paradas bruscas, cada sufrido pasajero a encontrado su 'hueco' y su particular punto de apoyo, esquinas, soportes de asientos, barras verticales o asideras en el techo, de repente ella aparece a mi lado, como si mi mente la hubiera atraido poderosamente, en una de las paradas bruscas una anciana sale despedida, la agarro 'in extremis', la energía cinética provocada por una rotonda tomada a gran velocidad, nos aplasta unos a otros, parece que el autobús vaya a volcar, pero lentamente recupera su posición inicial.

Se le escapa un grito por la impresión, entonces noto que su mano atrapa mi antebrazo con fuerza, soy su nuevo punto de sujección, a partir de aquí las nuevas energías, empeñadas en que no conservemos la verticalidad, curvas cerradas, paradas y acelerones se convierten en mis aliadas, cada parada más y más pasajeros, más acople entre los mismos, caras de circunstancias, miradas extraviadas al infinito, evitando los terribles cruces de ojos.

Ella me mira sin disimulo y no aparta su mano de mi antebrazo, cuando la interrogo con la mirada, sonríe discretamente para si misma, la chica se va a acercando con el ajetreo, hasta que su cuerpo se apoya en el mio, más pasajeros y ya noto su respiración un tanto agitada pero no disimulada. Percibo su cuerpo tibio, cuando en los acelerones, lo deja flotar a la deriva, sabiendo que se topará con el mio, me embriaga su suave perfume.


Curva a la derecha, frenazo, bote, acelerón, izquierda, frenazo, arrancada, serie de baches, ¿por qué no arreglaran los amortiguadores?....Los roces se van haciendo mas intensos y más consentidos. Tanto roce hace que mi pene empieza a coger un tamaño considerable. Ella mira, se da cuenta, me mira con una sonrisita cómplice y se acomoda apoyando su culo en mi paquete, dejando que se roce delicadamente.

No se como, noto su mano en mi polla, sin mirarme cambia la posición de mi miembro para acoplarlo entre sus glúteos. El contacto ya es pleno, ella se mueve lentamente arriba y abajo rozándose con mi pene consiguiendo que mi erección sea ya plena, noto que estoy empezando a mojarme.

Acabo de ver el lugar donde debía apearme, a pasado como una nube, ya no me molesta la gente, estoy tan a gusto, me quedo hasta que se baje ella. La chica sigue moviéndose con suavidad hasta que se da la vuelta y clava su pubis en mi miembro. Se abraza a mi cuello y con una voz muy bajita me dice.

–Creo que te has pasado la parada, has sido muy amable por ser mi punto de apoyo, me da un beso suave en los labios.

Bajó corriendo, era su parada. Me quede mirando a través del cristal como corría graciosamente mirando hacia la ventana agitando la mano.

domingo, 19 de abril de 2009


-Buhhhhh, buhhh, bahhhhh, ¡fuera!¡fueeeeera! ¡Que lo echen del local!

Mas gritos, silbidos, abucheos en aquel dichoso bar 'Karaoke', lanzó una última y torva mirada hacia el escenario.
Quizás no fue el día, ni el momento adecuado para cortar con ella, el día de San Valentín, quizás lo adecuado hubiese sido tener más tacto, una eficiente broker de bolsa sabe evaluar los riesgos, analizar los escenarios y sacar el mejor partido a todas las situaciones.

-No, si no eres tú soy yo, quizás sea muy inmaduro, no te merezco ..... se ha acabado el ciclo...fué bonito mientras duró....

No hubo la respuesta esperada, ni ninguna, solo unos ojos azules enrojecidos, que se inundaron de lágrimas y una última mirada de tristeza y decepción que jamás olvidará. El resto fue impredecible, le dio la espalda y subió a la tarima casi de un salto, empezó a bailar sola y quitarse la ropa mostrando la ropa interior que había comprado especialmente para él, en ese día tan señalado, disfrutando con cada milímetro de piel suave, acariciada por la atmosfera turbia de aquel local, el vacío, las caricias de las miradas, enseñaba su cuerpo con un estudiado recato y al instante siguiente, descaro, surgió de una armonía de movimientos desconocidos, provenientes de su belleza interior, nunca supo que existían, porque nunca tuvo que explorarlos, sus voluptuosas curvas entre los claroscuros de la luz y el humo grisáceo del tabaco, cobraron vida propia, pero el entusiasmo de la concurrencia estalló cuando agarró el micro y con una voz sensual dijo:
-Estoy y me siento terriblemente sola, ya no tengo novio, ¡me acaba de dejar!.

-¡bien! ¡bien! ¡que bieeeeeeeeeeen! ¡te queremooooooos!

Un impertinente foco, enfocó la mesa que ocupaba antes, aquel rostro que se había quedado paralizado, aquella cara con las mandíbulas contraídas, que denotaba el arrepentimiento de unas palabras que jamás debieron ser pronunciadas, unas muecas que desfiguraban totalmente a aquel hombre que ya no estaba tan seguro de si mismo.
La multitud estalló, envidiosa, celosa de aquel hombre que había poseído aquella joya.
El avanzó dando trompicones hacia la puerta y unos brazos poderosos lo lanzaron contra unas bolsas de basura.
Ella recibió una poderosa oferta de aquel club, dejó el banco y se dedicó al striptease, tuvo que bloquear un número de móvil, impertinente, antiguamente hubiera matado por recibir sus llamadas, pero ahora le resultaba tremendamente tedioso.

¿Sabeis lo mejor de esta historia?.... Qué es casi real, buscar en el Google: Randi Newton

viernes, 17 de abril de 2009




Bajar vídeo

Mirando este vídeo, me vinieron a la mente varios cuentos de los hermanos Grimm......

No doy pistas, mejor mirarlo....

Una buena lección a los prejuicios.
Si preferís ver el vídeo de Susan Boyle en Youtube

jueves, 9 de abril de 2009

-Dame un euro

-¿Ehhhh?. ¿Solo un euro?

-Eso bastará, de hecho debiera pagarte yo a ti

-Ni hablar, quiero que me cobres como a los demás.

-¡Antes muerta!. Tu no eres como los demás, no entiendo la mitad de tus palabras, pero me gusta oírte hablar despacio, respetas las palabras, las piensas, y me haces sentir cosas, me siento importante al hacerte feliz.
Normalmente mis clientes me hacen sentir mal, cuando acaban se quedan mudos, como arrepentidos de haber estado conmigo, se visten y se van sin mirarme, o se duermen entonces se me queda un hueco en el pecho, porque me siento utilizada como una colilla ya apagada, me gustaría oírles decir cualquier bobada.

–Yo vengo a comprar tus caricias, no ha enamorarme, quiero romper mi soledad, si te pago solo un euro, no me sentiré bien, habrás pérdido tu tiempo y yo mi dignidad, puedo pagarte bastante más y sería justo hacerlo. Mis lectores empiezan mis libros de poesías y los dejan a la mitad encima de la mesilla, o se aprenden burdamente cuatro frases para recitarlas a sus amadas. Tu me escuchas atenta, con esos ojos tan abiertos, tus caricias son la poesía de mi piel, su precio es infinito.

-Fóllame otra vez y págame infinito entonces.

-¿Sabes? Eres incorregible, me callaré y entonces sin el pago de mis palabras deberás cobrarme lo que es debido.

La puta lo miró divertida.

-Me gustas cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.....

-¿Tienes contestación para todo eh? pero no pares la poesía, debe escucharse entera.

-Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.

Como todas las cosas están llenas de mi alma
emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía.

Me gustas cuando callas y estás como distante.
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
Déjame que me calle con el silencio tuyo.

Déjame que te hable también con tu silencio
claro como una lámpara, simple como un anillo.
Eres como la noche, callada y constelada.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.

Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.

Neruda

El poeta arrancó a la puta unas lágrimas y sintió como la inspiración se retorcía en su interior al ver como la emoción se adueñaba de aquella cara, y se inundaban aquellos ojos tan abiertos.

Lo que le gustaba de ella, es que era así.

martes, 7 de abril de 2009

La propuesta es dedicarnos a oír una de las mejores músicas que hay, la naturaleza, por la noche a parte de que el aire huele a aire, resina, tierra mojada, se puede escuchar el silencio. Ese silencio se rompe al escuchar, ciertas aves nocturnas. Digo esto porque todos los años, a partir de estas fechas, cuando tienes que comenzar a dejar abierta la ventana por la noche, y trasnochas por el motivo que sea es disfrutar del canto de la Poco a poco vas distinguiendo tantos ejemplares como atención prestes, rondando por ahí tan alegremente. A veces se suman a la fiesta gorriones despistados.
Sea como sea, y si alguna vez os habéis despertado en una tienda de campaña muy de mañana por el canto de algún ave, seguro que era un mirlo. Su canto, un placer escucharlo.
En fin, para los que no tengáis cerca una lechuza, un autillo o un mirlo, Aunque hay que ir con cuidado también hay otro tipo de 'pájaras' que se pueden oír en el bosque.....las ninfas, si te pillan estás perdido. Si alguna vez por alguna casualidad os habéis despertado en medio del campo, en una tienda de campaña o sin ella, al amanecer y oís el canto de algún pájaro, seguro que será un mirlo, su trino tiene atributos similares a la música hipnótica, escucharlo es deleitarse.

Sin embargo no hay mejor música que la que se destila del bosque en el ocaso, cuando el aire huele a aire y el pino a resina caliente.

Ya entrada la noche, a través de la tierra mojada se puede disfrutar del silencio, roto por los sonidos fantasmagóricos de ciertas aves nocturnas.


Poco a poco el oído va separando las notas, los pájaros usan la siringe, el equivalente a nuestra laringe, lo que les permite disponer de dos cámaras que les deja emitir dos sonidos simultáneamente, que se van conjugando armónicamente distinguiendo tantas especies como atención prestes, mirlos, canarios aflautados, gorriones despistados, o el sonido majestuoso de los búhos.




Estaba tan absorto intentando identificar los sonidos que hasta me pareció oír una especie que no reconocía, entre tanta fiebre de sonidos distinguí el ritmo incansable de un pájaro carpintero pero mezclado con el aullido de un gato, me enfilé por un sendero que conducía a una especie de explanada entre la densa espesura de un bosque y presté más atención.


El sendero estaba flanqueado de peñascos atormentados por el sol y el fuego del cielo ardía en la tierra, ahora se distinguía claramente un gemido ansioso y repetido, me acurruqué entre las ramas del último árbol antes de un pequeño claro en el que se veían unas grandes piedras negras, unas estaban enhiestas y otras tumbadas en el suelo, me quedé sin aliento.


Encima de una de esas piedras celtas, una mujer se entregaba a un extraño ritual, se frotaba completamente desnuda contra un menhir que tenía forma de falo, enlazada la piedra con los muslos hasta formar parte de la misma, aplastaba su sexo contra la superficie áspera del megalito, subía y dejaba bajar lentamente con el empuje de sus redondeadas piernas, sus muslos eran redondeados y parecían formar de esta escultura viva, me estremecí por el deseo y una corriente eléctrica recorrió mi espalda.  


Su cuerpo desnudo se retorcía ante mi, una de sus manos atrapaba con fuerza la muñeca contraria y sus brazos de piel blanca exquisita rodeaban la piedra como dos serpientes que se mordían la cola, se retorcía en cada embate, sus cabellos de oro brillaban por el sudor y golpeaban su espalda rítmicamente como espoleada por un látigo de hilos de seda, el aire parecía estar paralizado ante aquel espectáculo de pasión desenfrenada.
Inesperadamente lanzó un grito, sacudida por un espasmo, se dejó resbalar poco a poco al suelo hasta donde estaban sus ropas.

Se repitió la escena en días sucesivos, en el ocaso del cuarto día justo en el momento en que se desnudaba, cuando iba a abrazar la piedra salí del bosque de puntillas intentando dar una imagen espectral y andando con toda la parsimonia de la que era capaz, con una rama de olivo en una mano, ataviado solo con una sábana blanca cruzada sobre el pecho, buscando el contraluz y dejando que la fantasía y la sombra alargada se escurriera entre las piedras dando una imagen enigmática y a la par majestuosa.

-Pero ¿Quién coño eres tú?
-Kévix (Dios de la Tierra Seca), le entregué la ramita para confirmarlo.

Contesté ahuecando la voz, como si de un Dios se tratase
-¿Entonces mi sacrificio ha funcionado?
-Si, serás muy fecunda a partir de ahora, pero aún te falta el último sacrificio.

Se desnudó y allí mismo apretada su espalda contra la piedra en forma de falo, aún caliente por los rayos huidizos del sol, buscó bajo la sábana y tomó mi atributo con el respeto que exigía una ceremonia entre dioses y humanos y se la introdujo lentamente entre sus ya húmedos muslos, cuando entró suavemente esta vez me abrazó a mi y su dulzura dejó paso a una furia incontrolada, quería quedar bien como representante de las humanas, sus largas crines doradas, empezaron a tener vida propia y acabó aplastada con mis embates como una mosca ante el cristal, contra aquella pared monolítica, exploté en su interior como nunca antes y nuestros gritos fueron contestados por pájaros, ranas, grillos y saltamontes en un festival sonoro nunca oído.



Después nos vestimos tranquilamente.
-Oye ¿y esta bici? ¿desde cuando los dioses van en bici?
Curiosamente apareció mi ropa al lado, creo que había descuidado un pequeño detalle logístico. Todo mi montaje ya no se sostenía......





Cuando vayáis por el bosque prestar atención a los sonidos, las ninfas, si te pillan estás perdido.


PD Para leer este post os recomiendo quitar la música (cruz roja navegador), apagar todas las demás páginas e ir activando todos los sonidos, para recrearnos en esta noche mágica veraniega.


sábado, 4 de abril de 2009



Permitirme que ponga esta foto, de la cual me gustan muchos pequeños detalles, quizás el antes y después de ese descontrolado mordisco a esa tableta. ;-)


Pero quizás lo que más, esa sonrisa tipo 'Monna Lisa', jocosa y pícara.





Quizás sea el vínculo de los que estamos metidos aquí, sea la imaginación o el interés por las diversas formas literarias o el lenguaje visual, a juzgar por los blogs asiduos (y los que no lo son tanto), a los que estoy enganchado, cada uno en su propia personalidad, pero desencadenantes todos ellos de la expresión de esa imaginación que es capaz de activarse con detalles mucho más minúsculos.


Aquí un vídeo inocente que desarrolla un poco más estos impulsos.

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